Errores comunes al contratar una consultoría IT

En un entorno cada vez más exigente en términos de eficiencia, cambios, escalabilidad y seguridad tecnológica, realizar periódicamente una consultoría IT para conocer el estado de los sistemas de información y equipos de una compañía, independientemente de su tamaño, resulta absolutamente fundamental.
Además, con la irrupción de la Inteligencia Artificial, surgen nuevas posibilidades, retos, modelos de negocio y formas de operar que nunca hubiéramos imaginado. Definitivamente, la tecnología es algo que cruza a todas las organizaciones y todos los sectores.
Sin embargo, no todas las empresas logran acertar con el proveedor correcto para realizar una buena evaluación del entorno IT a la primera. A continuación, repasamos los errores más frecuentes al contratar servicios de consultoría IT externa y cómo evitarlos para asegurar un retorno real de la inversión.
1. No alinear los objetivos del negocio con la propuesta técnica
Uno de los errores más frecuentes es contratar una consultoría IT sin definir claramente qué se espera lograr. Si la empresa no comunica con precisión sus objetivos, o la consultora no los traduce en soluciones técnicas tangibles, el resultado será una ejecución confusa y desconectada del propósito estratégico.
Qué hacer: Asegúrate de que el equipo asesor entienda tus retos, tus prioridades tecnológicas y tus restricciones operativas desde el inicio.
2. Elegir por precio (y no por experiencia)
El precio no siempre refleja el valor. Optar por la propuesta más económica puede derivar en implementaciones deficientes, falta de soporte especializado o soluciones poco escalables.
Qué hacer: Evalúa la experiencia del equipo, su capacidad técnica comprobada y los casos de éxito en sectores similares. Un buen partner en servicios de consultoría debe demostrar un conocimiento profundo del entorno tecnológico actual y una capacidad real de ejecución.
3. No exigir una ruta clara
Una consultora que no puede ofrecer un plan de acción detallado con hitos, entregables y métricas claras probablemente improvisará sobre la marcha. Esto afecta tanto los tiempos como los costes del proyecto.
Qué hacer: Antes de comenzar, solicita una planificación con cronograma, responsables, niveles de servicio (SLA) y criterios de éxito.
4. Ignorar la seguridad y la compatibilidad
Muchas consultorías se centran únicamente en implementar soluciones funcionales, dejando de lado aspectos críticos como la ciberseguridad, la integración con sistemas existentes o el cumplimiento normativo.
Qué hacer: Toda consultoría tecnológica de calidad debe garantizar que las soluciones propuestas sean seguras, compatibles y sostenibles en el tiempo.
5. No realizar transferencia de conocimiento
Es un error común que el conocimiento se quede solo en la consultora. Cuando el proyecto finaliza, el equipo interno queda con dependencia total o sin las competencias necesarias para operar y evolucionar la solución.
Qué hacer: Asegúrate de que el contrato incluya sesiones de formación, documentación técnica y transferencia de conocimientos a tu equipo.
Conclusión
Una consultoría IT bien elegida puede ayudarte a optimizar recursos, mejorar tu infraestructura, acelerar la transformación digital y proteger tu entorno. Pero para ello, es fundamental evitar estos errores.
En Serban Group, llevamos mas de 20 años realizando este tipo de asesoramiento tecnológico. Nuestra misión es ofrecer un servicio de consultoría alineado con las necesidades técnicas reales de nuestros clientes, con una ejecución clara y visión estratégica. Si quieres mas información puedes contactarnos aquí.